Bienvenidos!

Bienvenidos a nuestro blog, el cual es parte del trabajo del curso Ética para los Negocios de la UPC (ciclo 2010-2). El tema que analizaremos a lo largo del curso es: "Enriquecimiento ilícito". Dicha modalidad de fraude se ha convertido, lamentablemente, en un caso común en nuestra realidad empresarial. Por este motivo creamos el blog como un medio encargado de analizar conceptos, ejemplos y casos que nos permitan conocer sobre el tema en cuestión y así tomar conciencia de la gravedad que dicho fraude representa en nuestra sociedad. Es de esta manera que se podrán sugerir y adoptar posibles soluciones que favorezcan el desarrollo de la ética empresarial. Los autores son: Daniella Cortez, Cristina Orbegoso, Jaime Llerena y Héctor Castillo.

martes, 26 de octubre de 2010

Variable de intensidad moral en el caso Petrogate

VARIABLE DE INTENSIDAD MORAL: Probabilidad de efecto
Se refiere a la probabilidad de que los daños o beneficios realmente vayan a ocurrir. Se maneja la probabilidad a favor de los interesados quienes definen la probabilidad o importancia del efecto que se pueda generar.

Análisis de la probabilidad de efecto en el delito de enriquecimiento ilícito Caso: Petroperú

En negocios, el enriquecimiento ilícito consiste en malos funcionarios públicos reciben una comisión de los interesados en ganar una licitación para que los favorezcan en las  convocatorias públicas.
Constituye un acto ilícito penado por la Ley 28024, que regula la gestión de intereses en la administración pública para asegurar la transparencia en las acciones del estado (llamada comúnmente la  Ley del Lobbing).
En el caso de la Operación Petroperú – Discover Petroleum , hay una falta de actuación ética. Éticamente se está actuando con la variable de probabilidad del efecto de la intensidad moral ya que la empresa interesada y los gestores de la licitación que representan a la empresa del estado, en este caso Petroperú, concertaron previamente  el  beneficio para ambos, arreglando los términos de la licitación para que coincidan con las características del favorecido Discover Petroleum y no con las de otros posibles postores.  Conscientemente ambos sabían que actúan en contra de la ley, pero para darle una apariencia legal se cumple con la licitación pública con la finalidad de contrarrestar o eliminar el efecto negativo de ser descubiertos y maximizar la posibilidad de ser favorecidos por los intereses comunes previamente concertados antes de producirse la licitación.
En este caso todo indica que hacia el exterior, llámese medios u opinión pública la magnitud de esta operación se desconocía, pero existían ya algunas sospechas de que algo no muy santo estaba en la ya existía desde el 2008.

En los audios de Business Track  del 20/2/08 se escucha de Rómulo León Alegría que  Discover Petroleum es una compañía nueva que tiene seis millones de dólares en el banco, tiene un millón cuatrocientos mil dólares por cobrar, un activo fijo de tres millones de dólares, deudas a corto plazo por 13 millones y un patrimonio de 11 millones de dólares. Con estos montos esta empresa no califica para que nosotros [Perú-Petro] podamos considerarla en el proceso de adjudicaciones". (A pesar de tantos factores en contra, Discover Petroleum, tras su sociedad con Perú -Petro, consiguió el máximo puntaje de calificación).

Esta es una prueba más de que se ha usado la probabilidad del efecto de la intensidad moral, ya que como la empresa no reunía las condiciones se acuerda la alianza con otra empresa para poder ganar y evitar reclamos posteriores a la licitación de los otros postores o anulaciones del proceso.

Segundo caso Petroperú: Operación con Petrolera Monterrico.

Todos recordamos algunos de los últimos “petroaudios” en que don Alberto “Bieto” Quimper, el hombre del faenón, aboga ante Petroperú y Perúpetro a favor de Petrolera Monterrico, de propiedad del empresario Julio Vera Gutiérrez, gran amigo personal de Jorge del Castillo. Pues bien, según documentación del sistema estatal de contrataciones, hasta el año 2005, Petrolera Monterrico era una muy pequeña empresa, que en Abril de ese año consiguió un contrato con Petroperú por 5 mil 114 soles para hacer un servicio de mantenimiento a un enfriador. El 2006 no tuvo ningún contrato con el Estado. Sin embargo, en el 2007, durante la gestión de Jorge del Castillo como Primer Ministro, obtuvo un nuevo contrato por 4 millones 752 mil dólares, y a continuación otro contrato por la friolera de 50 MILLONES 929 MIL DOLARES.

El primero se firmó el 11 de Enero del 2007 por 4 meses, para suministrar petróleo crudo para la refinería de Talara y venció en Mayo. Al vencerse el contrato PETROPERÚ toma un acuerdo de Directorio en el sentido de “Aprobar el requerimiento de suministro de petróleo crudo a fin de realizar un proceso de selección correspondiente en el marco del Reglamento de Adquisiciones y Contrataciones”. Hasta ahí todo parece normal. En Mayo del 2007, PETROPERÚ convocó a un concurso para seguir suministrando petróleo crudo para Talara. El ganador obtendría un contrato nada despreciable de más de 50 millones de dólares.
Aquí lo curioso, rápido e inaudito que éticamente se calificaría como el primer hecho de manipulación de la probabilidad del efecto de la intensidad moral : el 8 de Mayo PETROPERÚ cursa las invitaciones a los postores. Al otro día 9 de Mayo recibió la propuesta y el mismo 9 otorgó la buena pro. Por supuesto Petrolera Monterrico ganó el contrato por 50 MILLONES 929 MIL 299 DÓLARES para suministrar 744,600 barriles de petróleo crudo durante tres años.

Pero según documentación interna de la empresa estatal todo se arregló incluso antes de invitar a las empresas a concursar, lo que ya demuestra éticamente el delito de manipular el efecto de la intensidad moral.
Otra manipulación de la probabilidad del efecto de la intensidad moral se había producido ya el 27 de Abril del 2007, 11 días antes del concurso PETROPERÚ había redactado un documento llamado “Hoja de acción” el cuál “aprobaba la adquisición directa de 744,600 barriles de petróleo crudo a la compañía Petrolera Monterrico S.A.” Esta “Hoja de acción” se basaba a su vez en un informe emitido por la Superintendencia Técnica de Talara, el 18 de Marzo del 2007, dos meses antes del concurso “público y transparente”, donde se recomienda “mantener el suministro de crudo ofertado por “Petrolera Monterrico”.

La “Hoja de Acción” también dice que el 9 de Abril, la Gerencia de Operaciones Comerciales haría una indagación de mercado para saber que empresas estaban interesadas en concursar, pero en un acto que se realiza en sentido inverso al tiempo, Petrolera Monterrico envía tres cartas ACEPTANDO PARTICIPAR EN EL CONCURSO DE 50 MILLONES DE DÓLARES, los días 2 de marzo, 6 de Marzo y 9 de Marzo del 2007; ES DECIR UN MES ANTES QUE PETROPERÚ HAGA LA CONSULTA A LAS EMPRESAS. Con las cartas en la mano recién realizan la “indagación de mercado”. Según el informe se consultó a 17 empresas, sin mencionar el nombre de ninguna y afirman que todas se negaron a participar. Esto es una grosera manipulación de los efectos de la intensidad moral, aparentemente se cumple con la ley pero realmente no se hace y sólo se cumple con la formalidad para preveer consecuencias negativas.

Otro detalle que refleja el uso indebido de información privilegiada es que el monto referencial propuesto por PETROPERÚ para el contrato fue de US$ 50’929,299.72, el 4 de Abril del 2007. Y por supuesto Petrolera Monterrico, por pura coincidencia propone US$ 50’929,299.72 el 9 de Mayo del 2007. Que tal, como coincidieron hasta los centavos. Finalmente se compromete a otorgar 744,600 barriles de petróleo crudo, con fecha 9 de Mayo, día de la buena pro y el precio por barril según OSINERG era de 61.54 dólares, que multiplicado por los barriles da US$ 45’822,684 como precio real. Sin embargo como los de PETROPERÚ son buena gente ofreció US$ 50’929,299.72, lo que hace una diferencia de 5 millones 106 mil 615 dólares.




Por: Cristina Orbegoso

No hay comentarios:

Publicar un comentario